El diálogo
Hola a tod@s, abro un nuevo post con algunos consejos a la hora de usar "el guión", sí, esa raya o más bien conocida como guión largo que usamos cuando queremos que nuestros personajes conversen. Como sabéis intento ayudar con mis simples métodos a escritores o futuros escritores, a mejorar sus historias y a que brillen con más luz.
EL DIÁLOGO
En toda obra narrativa existe el diálogo, la
comunicación de un personaje (o ente) para expresarse, y de esta manera
accedemos a él conociéndolo un poco mejor, así sabremos más sobre su carácter,
su sociabilidad en/con el mundo.
Los diálogos pueden ser desde frases simples hasta
conversaciones que duran más de cinco páginas (pero no es aconsejable que
alargues mucho el diálogo, ya que puedes cansar al lector).
El
diálogo forma parte del texto narrativo, el personaje interactúa con otros
personajes mediante conversaciones, ya sean de la vida cotidiana, discusiones,
coloquiales...
Cada
vez que se abre un guión se considera que es un párrafo; igualmente no se debe
poner un espacio, entre el guión y la primera palabra.
—Su
camisón era tan blanco como la Luna.
Las
comillas o quizás la letra cursiva (la utilizo yo), suele emplearse cuando se quiere
expresar un pensamiento, un sueño, una imaginación...
Sentí
mis manos frías, "¿Cómo?
¡Imposible!"
Cuando
se abre un guión (habla un personaje) y el narrador quiere decir algo al respecto,
hay que cerrar los guiones...
—¡Quiero que te marches! —contestó fríamente
Elisa—. ¡Ahora!
Si
os dais cuenta, en el párrafo anterior he colocado un punto final, ya que la
frase ha terminado, y el comentario del narrador también.
Un consejo: debemos intentar
diferenciar el tono de voz de cada personaje, para que el lector lo intercepte
cuando lea el diálogo. Debemos recordar que un buen diálogo hace real y único
al personaje.